El salario mínimo de Guatemala y el de México por José Manuel Prado Abularach
El gobierno del presidente mexicano Manuel López Obrador, incremento el salario mínimo para el año 2019 en un 16.21%, para pasarlo del actual Q33.62 a Q39.11, en tanto que el de Guatemala rondará en Q100.00 diarios, es decir el salario mínimo guatemalteco es 2.56 veces más alto que el que gana un trabajador mexicano. Además, las prestaciones legales de indemnización, aguinaldo y bono 14, son inferiores las mejicanas a las guatemaltecas en total.
Sin embargo México, supera con creces a Guatemala económicamente, existe un mayor desarrollo en la educación, en la salud, en la industria, en el PIB, en el ingreso promedio de todo tipo de trabajador, que en Guatemala. Entonces ¿Qué es lo que pasa?
La insistencia en los incrementos progresivos en el salario mínimo anuales de los trabajadores guatemaltecos, para mi tiene varios objetivos: mantener la informalidad de cientos de miles de empresas, privar a los trabajadores de las pequeñas empresas al acceso al IGSS, crear un caldo de cultivo político de insatisfacción con el pago de prestaciones a los trabajadores de la informalidad empresarial, incrementar la pobreza, disuadir a los emprendedores para que formalicen sus pequeñas empresas, que el Estado mantenga la impunidad para no pagar sus aportaciones obligatorias al IGSS, obligar a los trabajadores de la empresa privada para que subsidien al Estado injustamente que no cumple con sus obligaciones de pago al IGSS, acusar malintencionadamente a la empresa privada de oponerse a la mejora salarial de los trabajadores y finalmente crear una conflictividad anual permanente de los trabajadores y la empresa privada.
Las mujeres trabajadoras para el hogar, deben estar inscritas en el IGSS, para poder gozar de todas sus prestaciones, pero las familias que las emplean generalmente no tienen acceso al pago de mínimo salarial y menos para cumplir con los pagos al IGSS.
El salario mínimo, como su nombre lo indica, en México es el camino para la formalización de las pequeñas empresas y para que cualquier nuevo emprendimiento se pueda iniciarse en la formalidad. Debemos de tomar ejemplo de los mejicanos, creando un nuevo salario mínimo No.2, más bajo que el actual para que las pequeñas empresas informales y los nuevos emprendimientos pequeños, lo puedan pagar, se legalicen pagando sus impuestos, además se puede lograr que las familias inscriban en el IGSS a las empleadas del hogar y que reciban sus prestaciones laborales.
El salario de cualquier empresa debe estar acorde con la capacidad de pago de la misma, tomando en cuenta sus ventas, la rentabilidad, prestigio y la escala salarial que tenga capacidad de pagar según la descripción de puestos y salarios de la empresa. Cuando una empresa que tiene capacidad económica para pagar salarios más altos y no lo hace, esta traicionando a la justicia, y en un momento determinado tendrá problemas que le puedan impedir su funcionamiento o tendrá conflictos laborales permanentes o sus empleados emigraran a otras empresas.
El salario mínimo No.2, debe ser una referencia para el pequeño empresario emprendedor, pueda evaluar que el inicio de su empresa debe tener capacidad para cumplir con las prestaciones laborales.
Las leyes laborales y tributarias, deben cumplirse por parte de cualquier empresa, pero cuando se le establecen impuestos injustos o salarios que no puedan pagar, o se van a la informalidad o desaparecen, y todos pierden, los trabajadores sin empleo, pagos de impuestos, consumidores por menos oferta y menos ventas de los proveedores.
