El proyecto común por Luis Javier Crisóstomo
Es cuestión de vista y oídos para darnos cuenta de que las personas que aspiran a puestos de elección popular solamente necesitan buscar respuestas a sus necesidades personales y familiares. Está ausente la evaluación de los impactos que ha tenido en la vida de los pueblos la organización política que actualmente se tiene. La organización que se tiene desde la época colonial, pasando por la independencia criolla y la época actual no ha cambiado en sus fundamentos y en su estructura. Tanto daño ha hecho en la vida de los pueblos de generación en generación especialmente para los empobrecidos y para los pueblos originarios quienes han recibido la peor parte después de que sus antepasados fueron despojados de los medios de vida con que contaban. A la fecha, no hay algún partido político tradicional que impulse la propuesta de construcción participativa del Estado sobre principios y valores democráticos, de justicia, de bien común con la representatividad de los pueblos originarios que existen en Guatemala. El Estado que tenemos en la actualidad es racista, excluyente e inoperante para contextos de multietnicidad donde los principios, estructura y servicios públicos deben ser interculturales. El Estado actual responde solamente a los intereses de los que controlan la riqueza en el país y por lo mismo, el Estado en la práctica es para los poderosos y la mayoría de empobrecidos en Guatemala solamente sirven para mantener esta organización política injusta que solo problemas ha provocado para la mayoría de guatemaltecos.
La visión corta y colonialista que tienen varios candidatos a presidente educados en instituciones que no logran identificar a la población excluida y marginada de Guatemala. El contenido de sus intenciones es seguir sosteniendo una estructura de Estado que por su propia naturaleza es injusta, antidemocrática e inoperante para contextos multiétnicos.
Al momento, no hay algún partido político que presente la propuesta política común para los pueblos de Guatemala que debe ser el Estado Plurinacional donde los principios, la estructura y sus funciones deben ser fundamentados sobre pueblos. Los servidores públicos con una formación especializada para atender servicios públicos desde el enfoque intercultural. Es poner a prueba que con el diálogo y con procesos democráticos se deben organizar los poderes del Estado para atender a los pueblos bajo un proyecto político común. Es un proyecto político que responde a la multietnicidad y donde la diferencia es un ingrediente para atender a todos de manera equitativa sobre la participación y representatividad de los pueblos.
Es lamentable que el proyecto común de los politiqueros presente a través de varios partidos políticos sea la impunidad para quienes se quedan con fondos públicos, a los violadores de derechos humanos y a los corruptos que han perdido la sensibilidad y la vergüenza por hacer uso de los puestos públicos de manera inadecuada. Las familias ricas del país tienen partidos políticos y más de alguna vez sus candidatos son corruptos al servicio de la causa de unos pocos. En tanto el proyecto de los candidatos a diputado, es hacerse de algún dinero de manera fácil pues más bien parecen ministros de infraestructura que ofrecen proyectos a los más ingenuos pobladores.
Es urgente que los partidos políticos se comprometan a diseñar por lo menos políticas públicas con contenidos relevantes, interculturales y de cobertura total que lleven posibilidades reales de provocar desarrollo para el mejoramiento de las condiciones de vida de un gran porcentaje de guatemaltecos.