Una plegaria para Mayra por Víctor Hugo Fernández

Nuestra entrañable amiga, Mayra Jimenez Rodriguez, poeta de un corazón guerrero, libra actualmente una difícil batalla contra la oscuridad de lo inexorable; esa tiniebla que lanza su guadaña lapidaria y nos arranca -en ocasiones dolorosamente- de la conciencia de lo vivo. Agotada y disminuida, ella se encuentra actualmente hospitalizada y los pronósticos son cautelosos. Mayra forma parte de los poetas costarricenses cuyas voces hemos podido recoger este año para el proyecto de voces de la Poesía Costarricense; su voz permanece entre nosotros, también en las tardes nostálgicas de la isla de Solentiname y más allá, sobre las aguas del lago Cocibolca, que tantas veces navegó con sus alumnos en el arte de la poesía, todos habitantes de aquel parnaso idílico que durante años ayudó a construir al lado del poeta Ernesto Cardenal, en Solentiname. Para Mayra una plegaria en agradecimiento por todo lo que nos dio y lo que nos sigue dando en su poesía. A su familia mucha paz, apoyo en la esperanza que estará siempre allí, y resignación. En este viaje por "la mar dulce" que lleva a cabo la poeta, le acompañamos desde el corazón.

upload.jpg