Filosofar o morir - Diana Brown
“La filosofía es la herramienta que nos permite cuestionarnos.” Fernando Savater, La aventura de pensar.
La filosofía sufre de la triste percepción de ser una disciplina aburrida, tediosa, plena de preguntas que no tienen respuesta, y entonces, ¿cómo se aprende de ella si se duerme en el aula? Los filósofos más conocidos son ilustrados como ancianos sedentarios, quienes se recuestan en una ubicación, generalmente inhóspita y dura, a exponer sabiduría, y los jóvenes estén sentados a sus pies, con semblantes absortos, extasiados, por los pensamientos que escuchan y en momentos, cuestionan. Se delibera ¿Cuál es la validez de una filosofía tan anciana en el pleno siglo veintiuno? ¿Ejerce influencia sobre la educación?
Los próceres de la filosofía son Sócrates, Platón y Aristóteles. Sus preceptos son referente para reflexiones personales de vida. En el aspecto educativo han instalado parámetros de valores y sensatez como ningún otro. Sócrates no escribió; se recogieron sus pensamientos en los diálogos de Platón, han inspirado a innumerables personas, compartidos con un estilo de charla, que ejemplifican en la retórica los personajes que conviven en el mundo, siendo observaciones tan válidas hoy como en su época, los años 400 antes de Cristo. Parte de los cuestionamientos que vive el ser humano, se desarrolla mediante la mayéutica. Este concepto nace de la palabra griega maieutik que literalmente quiere decir dar a luz. La mayéutica da origen al conocimiento por medio del cuestionamiento guiado, que toma como base el conocimiento natural, el conocimiento previo, ubicado en el metaconsciente, y por medio del proceso cuidadoso de cuestionamiento, permite llevar al estudiante, al guiado, a descubrir por si mismo, el conocimiento, o la ruta para llegar a él.
La técnica de la mayéutica se basa en la teoría de reminiscencia, el conocimiento natural del alma. Éste se acumula en combinación con las tradiciones y las experiencias de las generaciones pasadas. Más que en ningún otro momento, en el proceso vivencial de la mayéutica, el filósofo se torna docente y el docente se torna filósofo, en la búsqueda del conocimiento y su pausada integración dentro de la persona. El diálogo entre el docente y el estudiante es la herramienta que produce el proceso inductivo, la búsqueda y el encuentro con el conocimiento. El permanente cuestionamiento provoca el buscar más allá de lo evidente y el descubrimiento de lo que está dentro del estudiante, y después de la auto investigación, se afianza la misma persona en su ser.
La dinámica de responder a las preguntas con aún más preguntas lleva al camino del saber; y el descubrimiento que no es absoluta el conocimiento. Se visibiliza el discernimiento, se construye el aprendizaje. Esta experiencia se comparte con pares, que con preguntas entre varios, da inicio al trabajo colaborativo como hoy en día se conoce.
Platón continuó con los pensamientos de su mentor Sócrates y profundiza ahonda más. Su pensamiento se basa en las ideas; y establece que cada estudiante debe formarse de acuerdo a sus capacidades; no todos los estudiantes tienen los mismos talentos y por ende su educación es única. Su modelo educativo se dedica a la formación de adultos competentes para atender a las necesidades del Estado.
En “La República”, Platón establece la importancia de la educación desde las primeras edades; “… deberá enseñárselos (a los niños) jugando, para llegar a conocer mejor las inclinaciones naturales de cada uno” ; “..que si los juegos de los niños son regulados desde el primer momento, si el amor al orden penetra en su corazón, al mismo tiempo que la música, ocurrirá …. Que todo saldrá cada vez mejor….”; “La educación de la juventud y de la infancia. Si nuestros ciudadanos son debidamente educados y llegan a ser perfectos hombres de bien, fácilmente verán por si mismos la importancia de todos estos puntos y otros…”; “….hay que desterrar de las formas de la enseñanza todo lo que pueda sonar a coacción…..un espíritu libre no debe aprender nada como esclavo.”
Cuestionamientos pertinentes: ¿Cuáles son los preceptos básicos de la lúdica? ¿Cómo es la dinámica de búsqueda en el trabajo colaborativo? Y la educación personalizada, ¿a qué obedece? ¿Qué rol toma el conocimiento previo como parte de la construcción del aprendizaje? Las dinámicas modernas gozan de las raíces antiguas, complementadas por la tecnología, mayor comprensión de las neurociencias, la comprensión de la estimulación oportuna, el trabajo cooperativo, todos estos obvios y patentes en los diálogos que demuestran el pensamiento humano, su lógica, o carencia de la misma, que ilumina el camino a la sabiduría, el conocimiento y la felicidad.
La filosofía es la madre de la educación; el ella, y la infinidad de personas que aportan sus visiones enriquecedoras y sui generis, se amplía la perspectiva de su aplicación, reconociendo la unicidad de cada persona humana. Descartes, Locke, Spinoza, Schopenhauer, Kierkegaard, Dewey, Wittgenstein, Heidegger, Bauman, Pieper, Savater y demás, presentan, exponen, desnudan su alma al lector y al alumno: pues qué es el filosofo si no un eterno estudiante? Y qué es el ser humano si no un eterno estudiante? ¿Y el estudiante no es el eterno filósofo, cuestionando sin cesar? Todo ser es filósofo, en su visión de vida, la interpretación de sus logros, desafíos y derrotas, y como los aprovecha para llegar al fin final de la vida, la felicidad.
Filosofía no es una asignatura pasajera de la vida; es la interpretación de ella y su gozosa acomodación.