Ignacio España - Minecraft: el Mayor Juego del Mundo y su Rol en la Educación.
Antes de empezar, y de forma resumida, Minecraft se puede explicar como un videojuego con geometría similar a bloques Lego, donde existen elementos de la física - como la gravedad - o química – como la combustión. En general se describiría como un mundo tridimensional donde el jugador crea sus propias aventuras a partir del ecosistema que encuentra en este mundo digital y donde elabora sus propias creaciones a través de bloques de diferentes colores y texturas.
Minecraft, gracias a su estilo caricaturesco, cuenta con una popularidad mayor que muchos de sus compañeros en este subgénero de videojuegos, siendo apto para niños mayores de 6. Adicionalmente, las características del juego permiten crear cientos de simulaciones basadas en fenómenos físicos del mundo real, lo que invita al jugador a adentrarse cada vez más.
Entre los elementos característicos se encuentra la progresión de invierno hacia verano, la transformación de materiales básicos en herramientas y productos, generación de biosferas e incluso simulación de principios matemáticos o corrientes eléctricas. Todo esto y más le ha dado una popularidad en muchos salones de clase, popularidad que otros competidores no comparten. Cada día pedagogos encuentran más usos para este software, pasando por simulaciones del cuerpo humano, construyendo una calculadora científica análoga, enseñando conservación del medio ambiente e incluso instruyendo sobre fenómenos geológicos.
Pero el ingrediente más importante en esta receta es la libertad que se le puede permitir al estudiante cuando juega. Puede decidir cooperar con sus compañeros para crear un mundo exclusivo para ellos o puede diseñar sus propias construcciones personales. Puede elegir entre un modo de aventura típico o sobrevolar y reconstruir el paisaje sin ataduras físicas. Los límites no existen, y esto es lo que invita a la creatividad del estudiante. Tal ha sido su impacto que una copia del software se incluye en las computadoras conocidas como Raspberry Pi, el ordenador más barato del mundo, para ser usado como una herramienta didáctica en comunidades de escasos recursos.
Claro, habrán estudiantes que no tengan interés en esto, o existirán otros que no comprendan las reglas del juego, y esto no tiene nada de malo. Después de todo, el punto de este artículo no es empujar un videojuego como requerimiento curricular, sino recordar que hay muchos caminos en la educación, y no rsta demás experimentar con algunos de los menos explorados.