El verdadero origen de la migración ilegal en Centroamérica por Juan Gregorio
La Biblia dice que, en los tiempos del fin “muchos correrían de aquí para allá”… (Daniel 12:4). No nos dice por qué se daría este fenómeno. Ahora nosotros ya sabemos porque, y es por la injusticia social que ha imperado, e impera aún en todos los países del mundo.
En Centroamérica en particular, esta injusticia social se remonta desde el día de la independencia de la corona española, en 1821. Esta independencia fue declarada por criollos y mestizos que estaban cansados de tributar a España. Pero, no tomaron en cuenta al pueblo indígena. Al contrario, abarcaron grandes extensiones de terreno, y los campesinos siguieron siendo tratados como esclavos, sin ningún derecho humano, como salud, educación, y un trato justo como un obrero digno de su salario.
De ahí en adelante fuimos gobernados por tiranos déspotas como Manuel Estrada Cabrera quien gobernó 22 años. Después de Estrada Cabrera llegamos a Jorge Ubico, quien gobernó 14 años, hasta que fue derrocado en 1944 por el mismo ejército que estaba en contra de él. Jorge Ubico fue el primero que hizo grandes tramos carreteros de terracería y puentes en las áreas más importantes del país, pero sin pagarles ni un centavo a los trabajadores, ni siquiera la comida. Los que podían, llevaban sus totopostes. Pero los que no, aguantaban hambre hasta por una semana.
Eran obligados a hacer estos trabajos forzados, cuando no tenían llena su tarjeta de vialidad. Esta tarjeta de vialidad era un control mensual de trabajo para todos los hombres mayores de edad, donde mostraba con quien y donde habían trabajado cada día de la semana. Cuando le trabajaban a alguien, este les firmaba los días que había trabajado con él. Estos trabajos patronales los hacían sin devengar ningún salario, los campesinos les trabajaban solo por el favor que les hacían de llenarles la tarjeta. Cuando no encontraban patrono, quedaban días vacíos en la tarjeta, donde indicaba los días que no habían trabajado. Estos días eran los que tenían que ir a trabajar a las carreteras, sin salario ni comida ni ropa. Sus ropas eran chirajitos de manta y caites de cuero crudo.
Además, durante el gobierno de Jorge Ubico, era prohibido cultivar caña para hacer panela para el consumo familiar, porque Ubico no quería que, uno de sus ministros, que era propietario de un ingenio de azúcar en la costa sur, tuviera competencia.
Al llegar a la presidencia el Doctor Juan José Arévalo Bermejo, en marzo de 1945, Guatemala vio el amanecer de un nuevo día. En su gobierno se creó el código de trabajo de ocho horas, con su respectiva remuneración. Se hicieron las escuelas tipo federación. También se fundó EL INSTITUTO GUATEMALTECO DE SEGURIDAD SOCIAL. Este gran presidente, cuando visitaba a un municipio, siempre llevaba ayuda de asistencia social para las comunidades, como ropa, caites, comida, etc.
Pero, el que se preocupó más por beneficiar a los campesinos, fue el que le sucedió Arévalo, Jacobo Árbenz Guzmán. Él le dio instrumentos de trabajo a los campesinos, tales como: machetes, azadones, palas, etc. También les daba dinero en efectivo a los campesinos para que cultivaran la tierra. A unos les daba Q.50.00 a otros Q.100.00; de acuerdo a la cantidad de tierra cultivable que fueran dueños. Además, les dio una pareja de reses a cada familia campesina, para que mejoraran su dieta alimenticia.
Esto alertó a los negociantes y terratenientes, porque, a quien le iban a vender los instrumentos de trabajo, si el gobierno se los estaba regalando. A quien le iban a vender carne de res, o leche y sus derivados, si ellos ya tenían en casa. “Esto es comunismo” pensaron los afectados. Luego, Buscaron ayuda en Estados Unidos, para hacer una invasión militar a su mismo país, quien de buena gana se prestó para esta invasión armada desde el vecino país de Honduras, porque la United Fruit Company (compañía norteamericana de la Bananera en Izabal), que incluía el negocio de Puerto Barrios y el ferrocarril, estaba siendo afectado también por la construcción de la carretera del Atlántico y el Puerto de Santo Tomás.
Ayudar a los pobres fue el pecado para derrocar al gobierno de Árbrnz. En Estados Unidos ya estaba ayudando a los pobres desde el tiempo de la recesión, con cupones para comida, y vivienda. Esto no era comunismo. Hasta la fecha se sigue dando esa ayuda a las familias más pobres, o en tiempo de desempleo.
Esa es la verdadera causa de la migración ilegal en Centro América, especialmente en el triángulo norte (Guatemala, Honduras y el Salvador), la marginación constante de las mayorías, por una minoría de mestizos, también llamados ladinos, que han tenido el poder desde el tiempo de la independencia. Los beneficios de la democracia no han llegado a los más necesitados.
Dios le reveló esto a Daniel, 500 años antes de Cristo, que en los tiempos del fin iban a suceder estas cosas. ¡Ya estamos en los tiempos del fin!