Juan Alberto Castañeda - Quo vadis Guatemala

Guatemala no termina de asombrarnos. El viernes 31 de agosto se dispararon las alarmas porque el señor Jimmy Morales cometió el atrevimiento de anunciar la salida de la CICIG en septiembre de 2019 y posteriormente ordenó que se negara el ingreso al país al Comisionado Iván Velásquez en medio de una lucha sórdida que se lleva a cabo entre guatemaltecos anticorrupción y guatemaltecos procorrupción, en escenarios laborales, estudiantiles, mediáticos y académicos que desencadenan enfrentamientos que polarizan aún más a la sociedad Chapina.

Como siempre en nuestro país el maniqueísmo se impone. Estamos tan fraccionados que lo vemos y lo sentimos tan natural. En las tertulias entre amigos, compañeros de trabajo o vecinos del barrio o la colonia surge la pregunta ¿sos antiaborto o a favor del aborto? ¿Le vas al Barza o al Madrid? ¿Sos católico o evangélico? ¿Sos procapitalista o prosocialista? ¿Sos anticicig o a favor de la cicig?

La verdadera pregunta es ¿Cuándo vamos a tomar partido por el país? ¿Cuándo nos vamos a unir para luchar por una educación de calidad, por un sistema de salud decente, por  una red vial que nos haga competitivos, por un sistema de transporte urbano que dignifique a la población?

¿Será que estamos condenados a vivir atomizados eternamente?

Una vez más se abre una ventana de oportunidad para demostrar de qué estamos hechos los guatemaltecos, si corre por nuestras venas algo de dignidad.

2015 fue un asomo a la primavera. Demostramos ante el mundo que la mayoría estamos hartos de la corrupción e impunidad. Hoy se nos plantea una interrogante enorme. ¿Aceptaremos los guatemaltecos dignos que un mandatario corrupto y ladrón, su gabinete impresentable y un congreso nefasto por las cuatro esquinas echen del país a la Comisión Internacional Contra la Impunidad?

En estos momentos hay regocijo y celebración en las cárceles de Guatemala. Los corruptos festejan. ¿El estatu quo gano la batalla contra el bien?

¿Y ahora quién podrá defendernos? ¿La ONU? ¿La embajada? ¿La Unión Europea?

Pienso que los únicos que podemos hacer algo por el país somos nosotros mismos. Debemos salir a las calles y tomar las plazas. De nosotros depende seguir sojuzgados por los corruptos  de siempre o salir a gritar a todo pulmón que queremos vivir civilizadamente, en un país con oportunidades de desarrollo, con democracia, equidad y justicia.

El momento ha llegado. Pueblo de Guatemala usted tiene la palabra.

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