GUATE..MALA, GUATE…LOCA, GUATE…BUENA, GUATE…POBRE, ¿Cómo llamarle a mí patria bella? por César Sagastume
Los que ostentan el Poder y la riqueza propician estrategias para dividir. El 2018 un año para olvidar. Empecemos a edificar la patria que nos merecemos.
La patria de hombres sabios, que han dejado grandes testimonios de ciencia y cultura, revestida de belleza natural, de gente laboriosa y luchadora, que combate la pobreza, con visión con ansias productivas para hacer el emporio de atraer económica, para erradicar la pobreza, pero también gente que transforma su conducta que minimizan fortalezas, en contraposición de hombres que te explotan y avergüenzan para mantener en la ignorancia, silenciando inspiraciones talentosas sin expresar sus ideales, coartando libertades que impiden mostrar su grandeza, practicando estrategias diabólicas que opacan y alienan generaciones para efectivizar sus voraces ambiciones.
A pesar de ser una patria buena, mala, loca y pobre, conforma un contexto complicado y confuso que no permite que los ciudadanos se revistan de patriotismo unificado para converger en el bienestar de todos, para conformar una patria prospera y libre que unifica esfuerzos para el bienestar común del pueblo y comprometida a la interpretación de la convivencia global, con principios de respeto mutuo para cumplir con dignidad de nación, compromisos, convenios y tratados, con organismos de naciones con principios que promueven la paz del mundo.
Es obligatorio inventariar la cantidad de aspectos que dan valor a nuestra patria, su riqueza natural, los sabios aportes de la cultura maya, que cada día sorprende al mundo, con sus avances científicos, que están impregnados en su monumentales obras en las ciudades de Tikal y tantas más que descubre cada día, establecidas en las tierras de El Petén, belleza natural, riqueza ancestral de sus cuatro pueblos Maya, Xinca y Garífuna, gente laborioso, creativa y con deseos de tener mejores condiciones de vida, académicos distinguidos, literatos importantes y deportistas de valor incomparable, por eso nuestra Guate debe llevar el apelativo GUATE…BUENA.
Al hacer el recuento de las debilidades y amenazas que se ciernen al dividir intereses, la práctica de contaminación perversa, de las invasiones llámese tendencias divisionistas de la sociedad, de grupos antisociales, la falta de fuentes de trabajo, de altos índices de desnutrición, corrupción, analfabetismo, falta de servicios de salud, educación de calidad, vivienda y todas las lacras que nos atormentan para encontrar la convivencia en paz, el termino GUATE..MALA nos llena de malos augurios, pero la Guatemala de Guatemalan, por sus raíces tiene otro significado. Se origina de la traducción de la palabra maya “Quiche” que significa lugar de muchos árboles que viene del náhuatl Quauhtlemallan.
No podemos dejar de mencionar que nos invade la locura que provocan los poderosos por la ambición del poder y la riqueza, de los grupos dominantes y de los dominados, de los opresores y oprimidos, de los que hablan y se expresan, alienando para silenciar y vivir a dispensan de los que les roba la libertad, de pensar y de exigir sus derechos que los confunden con las obligaciones que las extreman los dominantes, la locura de infinidad de grupos que todos quieren tener la razón, de los grupúsculos de organizaciones que pelean los del grupo A contra el grupo B, y los del grupo C y los del grupo X con el grupo Z y se terminan las letras del alfabeto para poder nombrar los intereses que se fraguan la infinidad de grupos, pero al final concluimos esta locura vuelve a nuestra patria en GUATE…LOCA.
La GUATE… POBRE, que se califica con esos indicadores de pobreza y extrema pobreza alarmante, que manejan los títeres y titiriteros que manejan al Estado que pretende desaparecer en sus sistema Republicano, en donde ya no sabemos cuál es el tipo de gobierno que practicamos, porque un pequeño grupo quiere tener la riqueza y mantener a la mayoría en extrema pobreza permitiendo aprovecharse de lo grande que es la patria que amamos.
Los bosques, las montañas, sus potenciales mineras, la belleza natural, su gente laboriosa, sus intelectuales, sus académicos sus hombres probos y mujeres santas, nuestra religión, que profesa la espiritualidad divina de los jesuscentricos, los valores de nuestros padres, los valore cívicos y morales que aún practicamos, nuestra cultura, artistas que pintan y cantan su belleza y a la humanidad como Arjona; entidades que trabajan para dar lo que el Estado le niega a los más necesitados, a los filántropos que dan sin esperar nada a cambio. Esa es la patria que amamos, esta es la patria que han querido llamarle Guate buena y/o Guate maya, pero es la misma. Es el mismo cielo, es la misma tierra.